martes, enero 29, 2008

"La otra historia de México: Juárez y Maximiliano"








El libro de "Catón" me causó lo mismo que esta foto











La otra historia de México: Juárez y Maximiliano, “La roca y el ensueño” tiene una misión: "rescatar del basurero de la historia” a los grandes personajes del Partido Conservador, ganadores, primero de la “Guerra de Tres Años” (1857-1861) contra los Liberales encabezados por Benito Juárez, pero grandes perdedores tras la derrota del Segundo Imperio mexicano (1862-1867).

Especialmente, el autor hace un continuo esfuerzo de rescate, machacón y muy poco crítico de dos de los conservadores: Francisco Maximiliano de Habsburgo, segundo emperador de México y del general Miguel Miramón, quien llegó a la presidencia de la breve república conservadora a la tierna edad de 27 años y se distinguió como invicto jefe del ejército en aquella guerra.

Armando Fuentes Aguirre, el autor, consigue demostrar, repasando correspondencia y documentos diversos que Maximiliano era un hombre bien intencionado y, además, demuestra que tenía una ideología liberal incluso mas acendrada que la de Benito Juárez aunada a “mayor respeto a los principios democráticos y a las leyes” que la que tenía este.

Miramón, después de leer “La otra historia…”, queda retratado como un gran patriota, honesto, congruente, incólume, integérrimo y opuesto a toda intervención extranjera en los asuntos de México. Fuentes A. demuestra incluso que era un caballero respetuoso de sus enemigos y, además, un amoroso y tierno esposo y padre.

Todo ello está tan sólida y abundantemente respaldado (al final de esta escueta revisión colocaré algunas comprobaciones que hice en la maravillosa biblioteca de Internet) que, si no se tiene conocimiento sobre el motivo esencial de la sangrienta y radical escisión entre los mexicanos de aquel tiempo, Maximiliano, Miramón y sus correligionarios tendrían, de acuerdo al autor, que quedar colocados como “los buenos” de la historia y Benito Juárez, con algunos otros republicanos (señaladamente Melchor Ocampo), habrían de ocupar el rol de “malos” y traidores a la patria.

El autor nunca es tajante y a lo largo de todo el libro tiende a neutralizar cualquier juicio explícita y radicalmente condenatorio de Juárez, pero su selección de actos juaristas inevitablemente llevarían a un lector neutral a considerar al presidente indio como un absoluto traidor entregado totalmente a los intereses gringos, dispuesto incluso a sacrificar territorio y soberanía nacionales a cambio de mantenerse, mezquinamente, en el poder.

Efectivamente, es indiscutible que Juárez buscó y obtuvo el apoyo económico y militar de los norteamericanos y que firmó el infamante Tratado McLane-Ocampo que comprometía gravemente la soberanía e integridad del territorio nacional. Fuentes Aguirre menciona ese tratado y otras múltiples manifestaciones de sometimiento de Juárez a los norteamericanos a lo largo de toda la obra.

Resulta creíble que se trate de una mezquina traición a la patria cuando apenas un decenio atrás, los gringos nos habían expoliado el 55% del territorio y todavía aspiraban a mas (particularmente Sonora y Baja California).

Es cierta también la afirmación del autor de que los gringos intentaron negociar aquel tratado con los presidentes Ignacio Comonfort y Félix Zuloaga, conservadores, diseñadores de la Revolución de Tacubaya dirigida a abrogar la Constitución liberal de 1,857, y que ellos se negaron rotundamente por lo que reconocieron y apoyaron al gobierno de Juárez.

Leyendo “La otra historia…” Juárez resulta indefendible. Además el autor tiene razón al afirmar que incluso Justo Sierra, su principal panegirista, criticó la firma de dicho tratado. Tiene razón también al señalar que los cultivadores de la historia oficial, herederos de Juárez, escamotearon la publicación de información sobre esa actitud “entreguista” de Benito, considerada como “la mácula” –la mancha- del prócer.

Evidentemente Juárez y sus mas cercanos colaboradores tenían algún interés que consideraron mayor al de ceder soberanía a los gringos. Para Fuentes Aguirre ese interés no puede ser otro, lo expresa tibia pero incansablemente a lo largo de su obra, que interés personal por el poder.

Fuentes Aguirre no abunda en otro gran interés de Juárez: quitar los fueros a la iglesia católica, a la que consideraba, a mi juicio correctamente, responsable del atraso, pobreza e ignorancia de la mayor parte de la población. Hay muchos testimonios documentales sobre ello que a nuestro autor no interesaron
La gran escisión mexicana ocurrió por la determinación de los liberales ( representados principalmente por Lerdo de Tejada, Melchor Ocampo, Santos Degollado y el propio Juárez) de acabar con las prerrogativas y fueros de la Iglesia Católica. Todos ellos eran católicos pero, a la vez, profundamente enemigos del clericalismo y de su influencia nefasta en la vida nacional: nadie en el país tenía derecho a profesar otra religión. La iglesia poseía mas del 50% de los bienes raíces de la nación, las parroquias eran una especie de “sucursales bancarias” que controlaban la economía del país sin ningún control ni sujeción a autoridades civiles. Los curas podían ordenar el encarcelamiento de quien se les antojara. Uno de esos encarcelados, injusta y arbitrariamente, fue Benito Juárez, cuando apenas iniciaba el ejercicio de la abogacía en Oaxaca…etc…etc.
Juárez era un profundo admirador del sistema de gobierno gringo, de su liberalismo y tolerancia. Su biografía y tenaces e indomables luchas sociales hacen difícil caracterizarlo como un vulgar traidor a la patria.


La simpatía del autor por Maximiliano y por Miramón lo hace documentar decenas de veces, sus rasgos sensibles, amorosos, patrióticos. Revisa profusamente datos biográficos lindos de ambos personajes, sus sublimes enamoramientos. Las cualidades martirológicas -es mi apreciación- de sus parejas. Los sufrimientos indecibles que "Conchita" Lombardo y su esposo, Miramón, tuvieron que sufrir en el exilio, incluyendo la muerte de una bebita. La antipatía por Benito Juárez, en cambio, lo despersonaliza y envuelve de crueldad, rudeza, intransigencia y ausencia de afectos. En ningún momento de la obra, aparece Margarita Maza, esposa y gran amor de Juárez. Nunca menciona las penalidades familiares, incluída la muerte de 3 hijos, que dieron lugar a sentidísima correspondencia entre ellos.
Juárez, en la obra reseñada es, nada menos y nada mas que: "La Roca"

El clericalismo y, particularmente, los fueros de la iglesia católica eran el mayor enemigo del progreso que Juárez identificaba. La iglesia detentaba el mayor poder económico y político del país y se oponía radicalmente, financiando incluso a las fuerzas armadas conservadoras, a cualquier cambio en su status. Fuentes Aguirre lo reconoce en algún párrafo pero en muchos otros la justifica y alaba, por ejemplo, en la pag. 298 escribe:

“Se juzga con equivocada severidad al clero mexicano del siglo XIX cuando se le llama retardatario y se le acusa de haber hecho daño al país al oponerse a cualquier disposición –como las Leyes de Reforma- que afectase su poder…..Tal juicio es muy injusto. Al menos a la luz del criterio religioso, el clero mexicano del pasado siglo debería ser objeto de alabanza….”

Fuentes Aguirre llama a la continua intervención norteamericana en nuestros asuntos “El hilo negro” de nuestra historia. Pero hay otro al que no da importancia, yo le llamaría, “El hilo clerical”. Veamos un poco de la alabadísima, por el autor, figura de Miguel Miramón.

A los 28 años de edad, Miramón es elevado a Presidente de la República después del Golpe de Estado contra la constitución liberal. Fuentes Aguirre escribe (p. 98-99):

“Es conmovedora la sinceridad con que el joven Presidente se dirigió a los mexicanos en un manifiesto que hizo publicar el 12 de Julio de 1859”

A continuación, F.A. transcribe dicho documento. Yo, a mi vez, transcribo textualmente el último párrafo:

“Hoy he tomado mi partido: he formado un programa que estoy resuelto a llevar a cabo con toda la fuerza de mi voluntad…Ofrecí consagrar mi vida a restablecer el orden y las garantías. Parecería que en mi sentir no hay nada más que hacer. Pero no: sería una equivocación grosera desconocer un elemento poderoso que enardece la lucha…Protesto por mi honor el más alto respeto y la más segura garantía a los intereses de la Iglesia; protesto por mi honor que no seré yo quien mengüe en un solo centavo sus riquezas; protesto sostener vigorosamente sus prerrogativas y su independencia. Pero estoy resuelto a adoptar el camino más conforme con nuestras creencias y con los estatutos canónicos para aniquilar ese germen de discordia que alimentará siempre la guerra civil en la República, y cuento con ser secundado en mi propósito por el sentido recto e ilustrado del venerable clero mexicano…”

La opinión de Fuentes Aguirre sobre el manifiesto puede resumir una gran parte del libro:

“Con letras de oro debería escribirse esa proclama del joven Miramón. Se declaraba un reformador…(¡Carajo!....como nos podemos engañar!...nota mía)… Si Estados Unidos no hubiese metido la mano para apoyar el programa anticlerical propuesto por Juárez -¿Impuesto a Juárez?- (nota de FA), la reforma de Miramón le hubiera ahorrado a México mucha sangre y, sobre todo, se habría evitado que por haberle dado el triunfo a Juárez, los norteamericanos hubiesen quedado para siempre como factor de influencia en la vida política de nuestro país.”

¡Que difícil es no ser ingenuo cuando la simpatía y la antipatía dirigen un análisis!

Algún epílogo tendré que escribir…no se cuando







En vacaciones leí “La otra historia de México”, de Armando Fuentes Aguirre. Debí haber escrito sobre esa obra desde hace un mes y, con absoluta desverguenza y sin sentir la menor pena he de decir que, negado a tomar notas en aquel tiempo, enfrento ahora la imposibilidad de “Tomar a Troya” sin disciplina, método y sistema.

Leí a Oz, a Eco, a Siegel (un tipo que prometía, una integración neuro-psicoanalítica que resultó menos interesante y estimulante que analizar las prácticas sexuales de las hormigas “mantequeras”)…perdón…¿en que estaba?...ahhh…leí a esos tipos y a Fuentes Aguirre bajo saturación sanguínea y cerebral de tequila y cervezas “bohemia” y, colocado en tan placentero trance, mientras está activo, me ocurre que me siento “Funes el memorioso”. Creo que todo lo que leo queda bien etiquetado en mi archivo mental y que soy una especie de “Gugl” que traerá a la conciencia toda la información por el simple hecho de comandarle el título del libro al lóbulo prefrontal…repetidamente pico “enter” y…nada concreto viene a mi pantalla opaca… desmemoriada. Solo generalidades.

Vendrá a hacerle justicia a los detalles el que, evidentemente en estado etílico, doblé las esquinas de las páginas que me parecieron mas interesantes. Revisaré y escribiré sobre ello.

Por ahora, diré que me pareció altamente criticable en “La otra historia”, la tercermundista costumbre de nuestros escritores de no documentar bibliográficamente lo que afirman sobre acontecimientos históricos y que la justificación de Fuentes Aguirre en el prólogo, con la que pretende subsanar la indolencia y falta de rigor, me parece una reverenda “mamada”. Ahí dice que no coloca las citas bibliográficas porque no pretende hacer un libro de historia “sino de divulgación”….¡Hágame usted el refavrón cabor! (Fuentes Aguirre dixit)

Seguiré

domingo, enero 27, 2008

POLISEMIA DE LA COMA

Me topé con la siguiente frase en
www.graciasporsuvisita.org/2007/12/06/mini-reflexion

"Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda"

El autor nos invita a pausar la frase colocando una coma donde mejor nos acomode.
Mi primera lectura fue femeninofílica porque automáticamente la leí así:

"Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer, andaría a cuatro patas en su búsqueda"

Pero, si los vaivenes de la ambivalencia me han mareado intensamente las últimas semanas, la frasecilla tiene que volverse misógina en la segunda lectura:

"Si el hombre supiera realmente el valor que tiene, la mujer andaría a cuatro patas en su búsqueda".

Una minúscula partícula hace una gran diferencia. Podríamos ajustarla a los acontecimientos políticos nacionales y no me cabría duda del sitio en que los perredistas y los panistas pondrían la coma:

"Si el ‘Peje’ supiera realmente el valor que tiene el ‘Espurio’ andaría a cuatro patas pidiéndole disculpas"

martes, enero 22, 2008

Discurso de Amos Oz aceptando el Premio PdeA

Seguí informándome sobre el autor antedicho y encontré su discurso en Oviedo. Me parece que lo articuló con absoluta coherencia en relación a las ideas que plasmó en el libro que comenté:  "Contra el fanatismo".
El discurso fue publicado en el diario "El País". Va:

Oviedo, 26 de octubre de 2007

La mujer de la ventana

Si adquieres un billete y viajas a otro país, es posibleque veas las montañas, los palacios y las plazas, losmuseos, los paisajes y los enclaves históricos. Si te sonríe la fortuna, quizá tengas la oportunidad de  conversar con algunos habitantes del lugar. Luego volverás a casa cargado con un montón de fotografías y de postales.

Pero, si lees una novela, adquieres una entrada a los pasadizos más secretos de otro país y de otro pueblo. La lectura de una novela es una invitación a visitar las casas de otras personas y a conocer sus estancias más íntimas.

Si no eres más que un turista, quizá tengas ocasión de detenerte en una calle, observar una vieja casa del barrio antiguo de la ciudad y ver a una mujer asomada a la ventana. Luego te darás la vuelta y seguirás tu camino.

Pero como lector no sólo observas a la mujer que mira por la ventana, sino que estás con ella, dentro de su habitación, e incluso dentro de su cabeza.

Cuando lees una novela de otro país, se te invita a pasar al salón de otras personas, al cuarto de los niños, al despacho, e incluso al dormitorio. Se te invita a entrar en sus penas secretas, en sus alegrías familiares, en sus sueños.

Y por eso creo en la literatura como puente entre los pueblos. Creo que la curiosidad tiene, de hecho, una dimensión moral. Creo que la capacidad de imaginar al prójimo es un modo de inmunizarse contra el fanatismo. La capacidad de imaginar al prójimo no sólo te convierte en un hombre de negocios más exitoso y en un mejor amante, sino también en una persona más humana.

Parte de la tragedia árabe-judía es la incapacidad de muchos de nosotros, judíos y árabes, deimaginarnos unos a otros. De imaginar realmente los amores, los miedos terribles, la ira, los instintos. Demasiada hostilidad impera entre nosotros y demasiada poca curiosidad.

Los judíos y los árabes tienen algo en común: ambos han sufrido en el pasado bajo la pesada y violenta mano de Europa. Los árabes han sido víctimas del imperialismo, del colonialismo, de la explotación y la humillación. Los judíos han sido víctimas de persecuciones, discriminación, expulsión y, al final, el asesinato de un tercio del pueblo judío.

Cabría suponer que dos víctimas, y sobre todo dos víctimas de un mismo perseguidor, desarrollarían cierta solidaridad entre ellas. Desgraciadamente las cosas no son así, ni en las novelas ni en la vida real. Por el contrario, algunos de los conflictos más terribles son aquellos que se producen entre dos víctimas de un mismo perseguidor. Los dos hijos de un progenitor violento no tienen por qué amarse necesariamente. Con frecuencia ven reflejada el uno en el otro la imagen del cruel progenitor.

Exactamente así es la situación entre judíos y árabes en Oriente Medio: mientras los árabes ven en los israelíes a los nuevos cruzados, la nueva reencarnación de la Europa colonialista, muchos israelíes ven en los árabes la nueva personificación de nuestros perseguidores del pasado: los responsables de los pogroms y los nazis.

Esta realidad impone a Europa una especial responsabilidad en la solución del conflictoárabe-israelí: en lugar de alzar un dedo acusador hacia una u otra de las partes, los europeos deberían mostrar afecto y comprensión y prestar ayuda a ambas partes. Ustedes no tienen por qué seguir eligiendo entre ser pro-israelíes o pro-palestinos. Deben estar a favor de la paz.

La mujer de la ventana puede ser una mujer palestina de Nablus y puede ser una mujer israelí de Tel Aviv. Si desean ayudar a que haya paz entre las dos mujeres de las dos ventanas, les conviene leer más acerca de ellas. Lean novelas, queridos amigos, aprenderán mucho.

Las cosas irían mejor si también cada una de esas dos mujeres leyese acerca de la otra, para saber, al menos, qué hace que la mujer de la otra ventana tenga miedo o esté furiosa, y qué le infunde esperanza.

No he venido esta tarde a decirles que leer libros vaya a cambiar el mundo. Lo que he sugerido es que creo que leer libros es uno de los mejores modos de comprender que, en definitiva, todas las mujeres de todas las ventanas necesitan urgentemente la paz.

Quiero agradecer a los miembros del jurado del premio Príncipe de Asturias que me hayan otorgado este maravilloso Premio. Muchas gracias y mis mejores deseos a todos ustedes. 

Shalom u-brajá.

Traducción del hebreo de Raquel García Lozano

http://www.elpais.com/articulo/cultura/Discurso/Amos/Oz         

domingo, enero 20, 2008

RESCOLDOS DE LO LEÍDO EN VACACIONES...ODIO Y AMOR


Alguna vez había comentado sobre mi abrumación para elegir lecturas. Me pasa ante la enorme cantidad de libros que me gustaría leer. Me pasa también ante la enorme cantidad de sitios interesantes en la mayestática “Red”. Uno de mis métodos para decidir comprar libros es esperar que alguna asociación de revisores premie la obra de un escritor. Entonces compro su obra premiada.
En Noviembre del año pasado me enteré que una de las instituciones premiadoras a las que pongo atención, la de los premios “Príncipe de Asturias” le otorgó el de literatura a Amos Oz. Pues bien, al proveerme de libros para mi retiro vacacional en la librería Ghandi (Suc. Monterrey), encontré “Contra el fanatismo”, de Oz, editado en España, por Siruela (2003) y traducido por Daniel Sarasola.
Es un libro si se juzga por el tamaño, chiquito, pero me impresionó favorablemente por la ecuanimidad y profundidad que consigue el autor, judío, para analizar el fenómeno del fanatismo. Es que él mismo confiesa haber estado inmerso en la miopía del fenómeno al haber nacido y haberse criado en Jerusalem, Capital Mundial del Fanatismo.
La lectura me hizo evocar a Humberto Eco (de quien, por cierto, leí su ultima obra “A paso de cangrejo” que despues comentaré) y su ensayo sobre “Ur Fascismo”, el cual plasmé prolijamente como una serie de entregas hace tiempo, aquí mismo.
Las ideas centrales son comunes a ambos escritores…Veamos:

1.-“ El fanatismo es màs viejo que el islam, que el cristianismo, que el judaìsmo. Màs viejo que cualquier ideologìa o credo del mundo. Desgraciadamente, el fanatismo es un componente siempre presente en la naturaleza humana: un gen del mal”

2.- “Hay un transtorno mental muy arraigado, una reconocida enfermedad mental llamada "sìndrome de Jerusalèn": la gente llega, inhala el nìtido y maravilloso aire de la montaña y, de pronto, se inflama y prende fuego a una mezquita, a una iglesia, o a una sinagoga. O si no, se quita la ropa, trepa a una roca y comienza a profetizar”


3.- “…para empezar –a combatir el fanatismo- hay que diagnosticar el mal. Esto es lo más fácil, basta con saber identificar la naturaleza del fanático, que surge, según Amos, “al adoptar una actitud de superioridad moral que impide llegar a un acuerdo”, y que le lleva a desear cambiar a los demás.

4.-“… los fanáticos creen que el fin, cualquier fin, justifica los medios, que la justicia es más importante que la vida. Y de esa forma se establece una lucha feroz entre fanatismo y pluralismo”.
Según Oz, los fanáticos “odian cambiar y no pueden concebir el cambio, a pesar de que siempre quieran cambiarle a uno”. Así es que la esencia del fanatismo reside en el deseo de obligar a los demás a cambiar.

5.- Pero la siguiente reflexión de Oz es la que nos podría permitir hacer conexión con un fanático, es lo que, eventualmente, puede impedir que nos destruyamos en una batalla desintegradota, a muerte, entre fanáticos de uno u otro signo, va: “El fanático es una criatura de lo más generosa. El fanático es un gran altruista. A menudo, está más interesado en los demás que en sí mismo. Quiere salvar tu alma, redimirte. Liberarte del pecado, del error, de fumar. Liberarte de tu fe o de tu carencia de fe. Quiere mejorar tus hábitos alimenticios, lograr que dejes de beber o de votar. El fanático se desvive por uno”


6.-.- El fanatismo está reñido – dice Oz- con los valores de la sociedad occidental: pluralismo, democracia, libertad de opinión y liberación femenina. Los fanáticos viven en un mundo irreal y excluyente, su propio mundo, al que pretenden que todos se ajusten. Amos Oz alerta de que hay mucho fanático anti-fanático.

7.- ¿Recuerdan el aserto de Eco en relación a que los fascistas se toman demasiado en serio?
Amos Oz coincide: “El sentido del humor es un gran remedio. Jamás he visto en mi vida a un fanático con sentido del humor”

8.- Otro remedio es el de la empatía usando la imaginación de tal forma que “puestos en la piel del otro” seamos capaces de entender sus odios, temores y rabia para poder, así, entender las motivaciones y circunstancias del “enemigo”.

9.- El otro “remedio”, dice Oz, es leer. Leer las novelas provenientes de quienes no comprendemos porque en ellas, en sus personajes, podemos identificarnos a nosotros mismos haciendo puentes entre nuestra humanidad y la del otro.

Buscaré algo más en la Red sobre Amos Oz…me parece un personaje potencialmente enriquecedor…luego les cuento.


Seguiré

miércoles, enero 16, 2008

ALGUNAS IDEAS DE S. FREUD SOBRE ODIO, AMOR, GUERRAS Y MUERTE

A tres días de reanudar labores para ganar el pan con el sudor de mis nalgas (trabajo sentado) me pregunto cuanto durará la sobredemanda. No he tenido, casi, momentos libres. 
Me gusta mi trabajo pero no la saturación. Aun predomina el placer pero sé que si esto se prolonga empezará la insidiosa corrosión del displacer.
 Mientras articulo mejor mis tiempos tengo que arreglármelas para no caer en el hartazgo que llevó a uno de los maestros del psicoanálisis en México, al final de su ejercicio profesional, a poner el siguiente letrero en la puerta de su consultorio:

"SI ESTÁ USTED BUSCANDO AYUDA, ¡BÚSQUELA CON SU CHINGADA MADRE!"
(En otras regiones hispanoamericanas "chingada madre" sería similar a "puta madre" ó, mejor, "violada madr)

Transcribo por lo pronto, literalmente, una pequeña carta de Freud escrita a fines de 1914,pocos meses después del estallido de la Primera Guerra Mundial y pocos meses antes de redactar "De guerra y muerte". El destinatario de la misiva, Van Eeden, era un psicopatólogo holandés a quien, sin embargo, se lo conocía más como literato. Hizo larga amistad con Freud, aunque nunca aceptó las ideas de este. La carta fue publicada por primera vez en alemán por Van Eeden en un semanario de Amsterdam en 1915. Aparentemente, nunca más volvió a imprimirse en alemán. Ernest Jones la tradujo al inglés en el segundo volumen de su biografía de Freud: 

Viena, 28 de diciembre de 1914

Distinguido colega:

Esta guerra hace que me atreva a recordarle dos tesis sustentadas por el psicoanálisis que indudablemente han contribuido a su impopularidad.

Partiendo del estudio de los sueños y las acciones fallidas que se observan en personas normales, así como de los síntomas de los neuróticos, el psicoanálisis ha llegado a la conclusión de que los impulsos primitivos, salvajes y malignos de la humanidad no han desaparecido en ninguno de sus individuos sino que persisten, aunque reprimidos, en el inconciente (para emplear el término de nuestro lenguaje), y que esperan las ocasiones propicias para desarrollar su actividad. 

Nos ha enseñado también que nuestro intelecto es una cosa débil y dependiente, juguete e instrumento de nuestras inclinaciones pulsionales y afectos, y que todos nos vemos forzados a actuar inteligente o tontamente según lo que nos ordenan nuestras actitudes emocionales y resistencias internas.

Ahora bien, si repara usted en lo que está ocurriendo en esta guerra -las crueldades e injusticias causadas por las naciones más civilizadas, el diferente criterio con que juzgan sus propias mentiras e iniquidades y las de sus enemigos, la pérdida generalizada de toda visión clara de las cosas-, tendrá que confesar que el psicoanálisis ha acertado en esas dos tesis.

Es posible que no haya sido totalmente original en ello; son muchos los pensadores y los estudiosos de lo humano que han formulado afirmaciones semejantes a estas; pero nuestra ciencia las ha elaborado detalladamente, empleándolas a la vez para descifrar muchos enigmas de la psicología.

Confío en que volveremos a vernos en tiempos mejores. Suyo cordialísimo,

Sigmund Freud

[Traducción de Luis López-Ballesteros y de Torres]

lunes, enero 14, 2008

Para W

(Sarah) Pie Jesu, pie Jesu, pie Jesu, pie Jesu (misericordioso Jesús)
Qui tollis peccata mundi(que quitas el pecado del mundo) Dona eis requiem, dona eis requiem (dales la paz -aunque "réquiem" es mejor traducido, literalmente, como "descanso")

(Paul): Pie Jesu, pie Jesu, pie Jesu, pie Jesu

( ambos): Qui tollis peccata mundi
Dona eis requiem, dona eis requiem

coro: Agnus Dei, Agnus Dei, Agnus Dei, Agnus Dei(cordero de Dios)

ambos: Qui tollis peccata mundi

Dona eis requiem, dona eis requiem (Dales la Paz)

coro: Dona eis requiem

ambos Sempiternam (Por los siglos de los siglos)

coro: Dona eis requiem

ambos: Sempiternam

Sarah: Requiem
Paul: Sempiternam

La fuerza de "Pie Jesu" es innegable y aún un incrédulo como yo se estremece con la dulce plegaria vocalizada por la Brightman y Paul.
Espero que esta dulzura mitigue el dolor ineludible e inevitable de tu pérdida
En mi infancia, con asistencia devota a las misas de Domingo que todavía alcancé a presenciar en el formato pre-Concilio Vaticano Segundo, las monjas de "La Divina Infantita" -si, así se llama la congregación- instaladas en mi pueblo y responsables de la educación primaria de las niñas -se mantenía una segregación absurda- entonaban, en las misas de difuntos, el Pie Jesu acompañadas de un minúsculo pero potente órgano.
El origen de la pieza -encuentro en Google- se remonta al 1270 y fué escrita como parte de una "Misa de Réquiem" por Tommaso da Celano.
Ha sido retomada muchas veces y la version cantada por La Brightman es la de la reposición del prolífico y "best-selleriano" Andrew Lloyd Webber quien declaró haberla dedicado a las víctimas de la violencia religiosa en Irlanda.

Las imágenes del video fueron captadas allá. No encontré una versión sin esas imágenes que, lo sé, son inadecuadas para lo que estas viviendo pero.. deja que sea la plegaria la que predomine

Realmente la traducción de la pieza no es tan sencilla como pudiera parecer a la vista de su austero vocabulario. No hay acuerdo generalizado pero, el registro indeleble de mi paso por aquellas misas de mi infancia me hizo elegir la traducción puesta arriba.
Te la dedico con cariño intención solidaria

domingo, enero 13, 2008

RETIROS

Regreso a la “habitualidad” después de 3 semanas de lo que podría llamar “mi período de fermentación”. Estuve casi ajeno a toda actividad gregaria, metido, la mayor parte del tiempo en un espacio de unos cuarenta metros cuadrados, acompañado de decenas de películas y algunos libros que deseaba leer. Ha sido el retiro más radical que he tenido hasta ahora pero, contra lo que se pudiera pensar, no tiene nada que ver con depresión, anhedonia ó nihilismo. Lo disfruté muchísimo aunque, debo confesar, los últimos días ya sentía el cosquilleo de reanudar mi cotidianeidad, en la que incluyo, por supuesto, reconectarme con mis contactos blogueros. El retiro verdaderamente radical espero que ocurra dentro de muchos años a pesar de la ominosa derrota que sufrí en relación a abandonar el cigarrillo. Fumé bestialmente.
Luego les platicaré sobre mis lecturas y “visturas”, por lo pronto, les comparto mis impresiones sobre la noticia de un intento de “retiro” un poco menos “bizarro” – en el sentido anglo- que el mío:


Diego, prepúber de 10 años de edad, ha saltado del anonimato total en nuestro áspero Monterrey, a la súbita fama proveída por uno de los vespertinos locales, el “Extra!”, periódico de línea editorial merecedora de la atención de antropólogos sociales por su consistente adhesión al pensamiento y a la semiótica Neandertal.
El rojizo – que nunca “rojillo”- periódico, publica la foto del polluelo, recostado en su cama, con la mano apoyada en uno de los tubos de la cabecera. El reportero nos hace saber que la mano no está apoyada sino adherida al tubo con “Pegamento Industrial” y nos informa que la simbiosis entre Diego y el tubo fue parte de un “ardid” del primero – el tubo, se deduce leyendo el “Extra!”, fue participante pasivo- para “evitar a toda costa ir a la escuela después de las vacaciones navideñas”.

La madre “del niño, pidió auxilio por teléfono a los socorristas, luego de que al darse cuenta de la situación trató de despegar sin éxito al niño”.
Acudieron elementos de la Cruz Verde y de Protección Civil quienes… “primero, intentaron despegar la mano del menor con agua, aceite y acetona, sin éxito. Posteriormente, un elemento de Protección Civil de Estado llegó con un disolvente especial, y logró despegar al estudiante. “
Leyendo lo anterior sentí alivio y mayor confianza en nuestros Protectores Civiles porque, conociendo algunos de sus heroicos rescates, pudieron haber optado por amputar la mano del güerco.
Para cumplir con su misión apostólica consistente en educar a nuestra cumbianchera población, el “Extra!” termina la nota advirtiendo, en equivalencia a la vieja frase “El crimen no paga” que:
“Tras ser despegado del respaldo de su cama, el niño no se salió con la suya pues tuvo que ir a la escuela 1 de Mayo, cerca de su casa, donde cursa el quinto año de Primaria..........”
La lección de vida que nos ofrece el reportaje tiene un valor inapreciable porque nos ofrece la opción, impensable antes de Diego, de pegarnos al teclado de nuestras computadoras para no salir de casa y pasar a la posteridad, en una foto del Extra! ó su infaltable equivalente en cada ciudad, con un socorrista analizando la situación mientras nosotros, impávidos, seguimos viendo la pantalla… alucinados.
La nota y foto originales están publicadas en el blog de “Javy Regio”, cumbianchero de hueso colorado, en http://javyregio.blogspot.com/